Aprovechando la escapada para visitar la XXIII Edición de las Edades del
Hombre, titulada Mons Dei, en Aguilar de Campoo, aprovechamos para hacer una
parada en el camino y visitar uno de los monumentos emblemáticos del románico
palentino: SAN MARTÍN DE FRÓMISTA.
![]() |
Vista sur de San Martín de Frómista
|
El municipio de
Frómista cuenta con algo más de un millar de habitantes y se sitúa en el Camino
de Santiago Francés, en la Tierra de Campos de la provincia de Palencia.
Durante la Edad Media, la villa destacó en el Camino de Santiago.
En el Códice Calixtino, figura como final de la sexta etapa (iniciada en Burgos) y principio de la séptima (que concluye en Sahagún). Posteriormente, continuó apareciendo en los itinerarios de los viajeros, pero fue perdiendo relevancia en el contexto por su proximidad a Carrión de los Condes. No obstante, conservó algunos hospitales de peregrinos.
En el Códice Calixtino, figura como final de la sexta etapa (iniciada en Burgos) y principio de la séptima (que concluye en Sahagún). Posteriormente, continuó apareciendo en los itinerarios de los viajeros, pero fue perdiendo relevancia en el contexto por su proximidad a Carrión de los Condes. No obstante, conservó algunos hospitales de peregrinos.
![]() |
www.etsy.com |
![]() |
Imagen obtenida de
google maps
|
Con anterioridad al
Códice, se fundaba un Monasterio en el siglo XI, dedicado a San Martín de Tours, pero quedó
relegado a un segundo plano. Pese a ello, no se aplicaron reformas importantes
que modificaran sustancialmente la estética y la estructura de uno de los
templos que se considera una obra maestra de la arquitectura medieval.
El resurgimiento de la ruta jacobea atrajo a gran cantidad de visitantes y especialistas a esta iglesia, que se ha convertido en un edificio emblemático del estilo románico.
La fundación del templo se la debemos a Doña Mayor de Castilla, viuda de Sancho III de Navarra, en torno al año 1066, tal y como señala el testamento de la reina consorte.
PLANTA Y ESTRUCTURA.
La planta que define este edificio es alargada, podríamos decir que responde al tipo basilical. El cuerpo se compone de tres naves longitudinales, culminadas por tres ábsides en la cabecera.
Las naves de la iglesia están cubiertas por bóvedas de cañón, divididas por arcos fajones, cuya función es sustentar el peso de la cubierta y derivarlo a los pilares y a los gruesos y compactos muros.
La fundación del templo se la debemos a Doña Mayor de Castilla, viuda de Sancho III de Navarra, en torno al año 1066, tal y como señala el testamento de la reina consorte.
PLANTA Y ESTRUCTURA.
La planta que define este edificio es alargada, podríamos decir que responde al tipo basilical. El cuerpo se compone de tres naves longitudinales, culminadas por tres ábsides en la cabecera.
![]() |
Planta extraída de www.wikipedia.org
|
![]() |
Ábside central. Capilla Mayor
|
![]() |
Cristo Crucificado. Finales del S. XIII.
|
![]() |
Ábside lateral
|
Las naves de la iglesia están cubiertas por bóvedas de cañón, divididas por arcos fajones, cuya función es sustentar el peso de la cubierta y derivarlo a los pilares y a los gruesos y compactos muros.
![]() |
Cubierta de la nave central
|
![]() |
Nave central
|
![]() |
Cubierta de la nave central
|
![]() |
Nave lateral
|
A pesar de que he aludido a la planta basilical, hay que tener en cuenta a través de la estructura de la cubierta de las naves, que en San Martín se aprecia el tránsito hacia la planta de cruz latina, pues el transepto no sobresale en planta, únicamente es visible en alzado. Podemos observar que el ábside y la nave central forman el eje longitudinal de dicha cruz, y que el eje está cortado perpendicularmente por una nave transversal.
Donde las naves se cortan, se genera un espacio denominado crucero, en el que se proyectó una linterna con cúpula sobre un tambor octogonal con pechinas, abierto con cuatro ventanas. Este fenómeno no es frecuente en la zona palentina, donde predomina el cimborrio cuadrangular.
![]() |
Vista exterior del
cimborrio octogonal
|
![]() |
Vista interior del
cimborrio
|
EXTERIOR.
Del exterior de la iglesia es destacable la cabecera, compuesta por tres ábsides, uno semicircular y de gran tamaño, y dos laterales de menor volumen que el anterior. Presentan una decoración muy rica, a base de una serie de columnas e impostas de ajedrezado que contribuyen a enriquecer de manera importante la estética de la cabecera.
![]() |
Vista exterior del ábside
|
En cada una de las fachadas se dispone una portada, siendo todas bastante simples, pues únicamente cuentan con la imposta del ajedrezado.
La más destacada de las portadas por ser más compleja, es la norte, que aparece franqueada por columnas con capiteles, que están bastante deteriorados por las inclemencias meteorológicas.
![]() |
Vista norte de la iglesia
|
![]() |
Portada norte de la
iglesia
|
Esta portada es la única original, sobresale del muro y está cubierta con un tejaroz soportado por canecillos historiados. Las otras dos, fueron copiadas durante la restauración, con un diseño más sencillo.
Rompiendo la horizontalidad románica, destacan las dos torres de los pies, en la fachada oeste, que no son usuales, pero que se sabe que se construyeron al mismo tiempo que el resto del edificio, pudiendo apreciarse la influencia del románico alemán.
![]() |
Fachada principal (oeste)
|
![]() |
Acceso a una de las torres de los pies
|
DECORACIÓN.
En lo referente a la decoración aplicada, tanto en el interior como en el exterior del templo, es una ornamentación abundante que sigue las tipologías románicas.
Un ejemplo clave, lo constituye el ajedrezado o taqueado jaqués, que recorre toda la superficie de la iglesia a diferentes alturas. El visitante puede apreciarlo en la línea de imposta de las ventanas, en el alero de los tejados, arranque de los vanos, etc.
![]() |
Taqueado jaqués o
ajedrezado
|
![]() |
Vano del ábside
|
![]() |
Vano del muro norte
de la iglesia
|
Otro elemento significativo son los capiteles, que se encuentran situados a los lados de las ventanas y coronando las columnas. En la decoración, la temática predominante es la vegetal, zoomorfa y antropomorfa.
Los capiteles vegetales son los más abundantes y su función es decorativa. Podemos apreciar una gran variedad de elementos ornamentales y en cuanto a la talla, pues algunos son muy toscos y contrastan con otros labrados profusamente con profundidad y detalle.
Los capiteles historiados son muy relevantes. La mayor parte de ellos muestran escenas bíblicas, como por ejemplo, las escenas de Adán y Eva tomando la manzana del pecado, la expulsión del paraíso, o la Epifanía, entre otros pasajes.
![]() |
Capitel de la “Adoración
de los Magos”
|
También sobresalen las representaciones de los pecados, como la lujuria o la avaricia. Así mismo, destaca un capitel que muestra los oficios vinculados a la construcción.
Los capiteles zoomorfos son los que comienzan a difundir la función doctrinal, pues representan símbolos, algunos con connotación positiva, identificada con la idea del bien, como los pelícanos, águilas, etc., mientras que otros encierran un matiz negativo y pecaminoso, tales como, serpientes, animales fantásticos, etc.
Un ejemplo emblemático de esta tipología de capitel es el relato de la fábula de la zorra y el cuervo, ya que en la Edad Media se empleaban motivos de carácter pagano para adoctrinar al populacho, siempre y cuando guardasen la simbología religiosa para transmitir el mensaje de la Iglesia.
Los canecillos son otros de los motivos ornamentales más representativos del arte románico. Se trata de pequeñas esculturas que decoran los aleros de los tejados, presentando gran variedad temática.
En total contabilizamos 309 figuras, que son representaciones vegetales, geométricas, animales, monstruosas y humanas.
Aunque en la actualidad desconocemos el significado que dio el hombre del medievo a este ciclo iconográfico, posiblemente su lectura era perfectamente conocida por sus contemporáneos, ya que tenían conocimiento de multitud de leyendas, cuentos, fábulas e historias que dotaban de simbolismo a esas figuras que nuestra cultura actual ha perdido.
Por lo tanto, los capiteles y canecillos interiores y exteriores, poseen una importante carga simbólica, pues les define una función didáctica que promueve la transmisión de la doctrina cristiana.
RESTAURACIÓN.
San Martín de Frómista fue declarada Monumento Nacional en 1894, y poco tiempo después, a comienzos del siglo XX, el templo fue restaurado de acuerdo a los criterios que en aquel momento se aplicaban en la arquitectura.
Ha sido un caso rodeado de controversias y polémica, pues la intervención ha sido muy criticada en la bibliografía, como un ejemplo de lo que no debe hacerse. Sin embargo, por otro lado, existen postulados que elogian la actuación llevada a cabo.
![]() |
Maqueta de San Martín
de Frómista
|
![]() |
Maqueta de San Martín
de Frómista
|
Por ello, para el arquitecto era obligatorio suprimir todos aquellos elementos añadidos que no fueran originales. El problema radicaba en que de manera habitual los edificios se erigían durante un período de tiempo muy largo, incluso durante varios siglos, y resultaba complicado dilucidar qué era y qué no era original, pues en cada etapa artística se habían incorporado elementos diferentes.
Disociar un componente de otro era una ardua tarea, pero se hacía.
Si algo quedaba inconcluso o no llegaba a construirse, intentaban actuar siguiendo las pautas del constructor medieval. A veces, se llegó a considerar que algo que ni había desaparecido, ni que se había llegado a utilizar, completaba estéticamente el edificio.
Partiendo de esta premisa, tras la reforma, podía adoptar una apariencia que no había tenido a lo largo de la historia, ni si quiera en la mente de aquel que lo diseñó en su momento.
Se trataba de un nuevo modo de entender la restauración del patrimonio a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. El máximo defensor de esta corriente fue Viollet-le-Duc, cuyos postulados rápidamente se difundieron por Europa en aquella época.
Manuel Aníbal Álvarez y Amoroso fue quien acometió la restauración. El complejo tenía adosadas algunas estancias, por lo que su apariencia era distinta a la que tiene en la actualidad.
El cimborrio era mucho más alto, ya que se agregó un cuerpo más como campanario, posiblemente en el siglo XV. Para poder acceder a este cimborrio, se dispuso una estructura a modo de pasarela que fue suprimida durante la restauración por considerarse un añadido posterior.
![]() |
Maqueta de San Martín
de Frómista
|
El arquitecto elaboró un proyecto en el que especificaba cuales eran las partes más susceptibles de derrumbe dentro del conjunto, por lo que pronto obtuvo el permiso para tomar las medidas oportunas e intervenir, incluso se le permitió derribar ciertas partes del edificio.
Hay especialistas que consideran que la tardanza en la intervención hubiese supuesto la destrucción total de la iglesia. Pero también es cierto, que otros opinan que finalmente se produjeron incoherencias entre lo proyectado y lo realizado, con lo cual, sin entrar en debates, volvemos a mencionar la polémica actuación que se llevó a cabo en Frómista, que no ha sido valorada positivamente por todos los expertos.
Lo que sí que debemos de tener en cuenta, es que tanto sus aspectos positivos como negativos, son producto de una serie de factores, como la sociedad de una época determinada, no de la voluntad de una única persona: el arquitecto.
VISITAS.
Para todos aquellos que quieran visitar la Iglesia de San Martín de Tours, en Frómista, a continuación facilito los horarios de apertura y cierre al turismo, así como las tarifas.
Esta información es susceptible de modificaciones, por lo que ante cualquier duda conviene consultar estos datos en la oficina de turismo correspondiente.
Nos vemos en una próxima visita. ¡Muchas gracias y hasta pronto!
BIBLIOGRAFÍA.
CHUECA GOITIA,
Fernando. (2001): Historia de la Arquitectura Española. Edad Antigua y
Edad Media. Ávila: Coam, Fundación Cultural Santa Teresa.
PUENTE, Ricardo.
(2005): La iglesia románica de San Martín
de Frómista. León: Editorial Albanega.
VV.AA. (2005): Historia
del arte: El Prerrománico y el Románico. Vol. 6, Madrid: Salvat.
VV. AA. (2013): Pequeño
diccionario visual de términos arquitectónicos. Madrid: Cátedra.
www.arteguias.com
www.artehistoria.com
http://es.wikipedia.org
www.arquivoltas.com
Como en entradas anteriores, proporciono un glosario con algunos términos nuevos que aparecen en el transcurso de esta visita. Espero que os sea de ayuda.
v AJEDREZADO
O TAQUEADO JAQUÉS.
Es
un tipo de ornamentación característica del románico, se define por la
disposición de pequeños cilindros alineados que se localizan en frisos,
arquivoltas, líneas de imposta, puertas, ventanas… Se basa en cuadrados (llamados
“tacos”) o bien en rectángulos (llamados ”billetes”), unos hundidos y otros
salientes de forma alterna, en líneas paralelas, al menos en números de tres,
dando lugar a sombras que simulan el tablero de ajedrez.
Este
tipo de decoración es típica del románico de Jaca, en cuya catedral se empleó
con profusión, de ahí la denominación de “jaqués”. Desde Jaca se difundió por
la Península Ibérica a través de Camino de Santiago, como apreciamos en San
Martín de Frómista, San Salvador de Leyre, San Isidoro de León, Santo Tomé de
Zamora, etc.
v ALZADO.
Es
la representación plana de la fachada de un edificio, mediante proyección
geométrica ortogonal, sin tener en cuenta la perspectiva, conservando éste
todas sus proporciones.
El
alzado se obtiene mediante proyección paralela del elemento a representar,
siendo ésta perpendicular al plano de proyección.
El
alzado es una de las representaciones del sistema diédrico, junto con la
planta. Es de gran utilidad en arquitectura.
v ANTROPOMORFO.
Hace
referencia a un humanoide, es decir, posee formas humanas.
v CANECILLO.
Hace
referencia a la cabeza de la viga que asoma al exterior y soporta la cornisa o
alero.
En
el románico, consisten en piedras pétreas colocadas en la parte superior del muro,
sobresaliendo del mismo y sirviendo de base al alero del tejado.
Se
usan también para soportar el dintel de las portadas.
Los
hay de diversas formas y significación. El más común es el canecillo simple,
carente de toda ornamentación, y con todas sus facetas rectas, pero no por ello
dejan de abundar los exornados con diversos motivos, ya sean de carácter
vegetal, alegórico o historiados con figuras humanas de profunda y concreta
significación.
v CIMBORRIO.
Se
refiere a aquella construcción que en una iglesia se eleva sobre el crucero del
templo, independientemente de la planta que presente y de cómo esté rematada
hacia el exterior.
Esta
estructura tiene una doble funcionalidad: por una parte, ilumina el interior
del edificio; y por la otra, realza el eje central del espacio religioso, allí
donde se cruzan los dos brazos de la cruz latina, formando el crucero.
v CRUCERO.
Espacio
definido por la intersección de la nave principal y la transversal, en las
iglesias de planta de cruz latina o griega.
Este
espacio se suele cubrir mediante una cúpula alzada sobre un cimborrio o tambor
que se sustenta en los arcos torales.
v EPIFANÍA.
Acontecimiento
religioso. Para muchas culturas las epifanías corresponden a revelaciones o
apariciones en donde los profetas, chamanes... interpretaban visiones más allá
de este mundo.
En
el cristianismo, es la fiesta en que Jesús toma presencia humana en la tierra,
es decir, Jesús “se da a conocer”; según la Biblia, esto ocurre en distintos
momentos y a diferentes personas, dando lugar a tres eventos:
- Ante los
Magos de Oriente, el 6 de enero, la más celebrada.
- La Epifanía
a San Juan Bautista en el río Jordán.
- Ante sus
discípulos y comienzo de su vida pública con el milagro en Caná, en el que se
inicia su actuación pública.
v ICONOGRAFÍA.
Es
la descripción del tema o asunto representado en las imágenes artísticas, así
como de su simbología y los atributos que identifican a los personajes
representados.
Engloba
todo lo referente a la descripción de cuadros, pinturas, monumentos, estatuas y
retratos.
v NAVE.
Denomina
al espacio comprendido entre dos muros o filas de columnas que se extienden a
lo largo de los templos u otros edificios importantes.
La
nave central es la que ocupa el centro del templo desde la puerta de ingreso
hasta el crucero o presbiterio, generalmente con mayor elevación y más anchura
que las laterales paralelas a ella.
Dependiendo
de la distribución de las naves en el interior de la iglesia, existen dos tipos
principales de planta en las iglesias cristianas: la planta cruciforme (una
nave principal cruzada por otras transversales o transepto) y la planta
basilical (una, tres o cinco naves paralelas que conforman una estructura
rectangular y terminan en presbiterios).
v PORTADA.
Es
el ornato arquitectónico que guarnece y adorna las puertas principales de los
edificios suntuosos.
Es
el conjunto de elementos arquitectónicos que conforman la puerta y su
ornamentación y en el cual aparece impreso, con sus peculiares caracteres, el
estilo del edificio. Se dice principalmente de los monumentos arquitectónicos
religiosos.
v TEJAROZ.
Alude
al tejadillo construido sobre una puerta o ventana, o al alero de un tejado.
v TRANSEPTO.
Designa
la nave transversal que en las iglesias cruza a la principal ortogonalmente.
El
espacio común entre el transepto y la nave es conocido como crucero.
El
transepto se sitúa habitualmente entre el presbiterio y la nave o naves
longitudinales como elementos de separación de ambos espacios.
En
la arquitectura románica la disposición habitual correspondía a la tipología de
cruz latina, siendo el transepto de mayor longitud que la anchura de la nave,
de modo que los brazos de aquel sobresalían lateralmente y se manifestaba al
exterior.
v TROMPAS.
Se
denomina a una bóveda semicónica de intersección que vuela fuera del muro. Se
trata de un sistema constructivo que permite superponer dos estructuras de
diferente trazado geométrico, como el de una bóveda octogonal o esférica sobre
una base cuadrada o para achaflanar la esquina.
Se
emplearon fundamentalmente en el románico y el gótico, permitiendo construir
cúpulas, tambores y cimborrios.
v ZOOMORFO.
Es
un adjetivo que califica a cualquier objeto que presenta forma o estructura
animal.